Es gravísimo lo que le sucedió al alcalde de Zapallar, Gustavo Alessandri. ¿Por qué? Porque constituye una etapa donde la autoridad no se respeta e incluso se le ataca con violencia, sabiendo que es alcalde de Zapallar. ¿A qué grado tiene que llegar el tema delictual, para que lo enfrentemos con estrategias modernas y con la decisión?
La delincuencia no se detiene y cada día aumenta más, mientras la autoridad sigue con Mesas de Trabajo y sistemas alambicados que hasta ahora. No han logrado detenerla y ojalá superarla.
La ciudadanía no resiste más este estado de cosas y es necesario enfrentarla con urgencia
Hoy fue un alcalde … ¿y mañana quién?