Tenemos mucha capacidad para potenciar situaciones que provocan escándalo como para olvidarlas. Definitivamente, somos así y va a ser muy difícil cambiar. Como que está en nuestra idiosincrasia.
El programa de televisión “Informe Especial”, nos llevó a recordar el crimen de Tomasito. Después de dos años, no hay culpables y se reconocen variados y no pocos errores en la investigación. Además, uno recuerda el crimen de Matute Jones o el de Rodrigo Anfruns, donde nunca se aclaró totalmente lo sucedido.
Y así tantas situaciones más, como el hecho dónde desaparecieron muchos miles de pesos en las manos del hijo del General y nadie dijo nada. Tampoco se sabe mucho del milico gate, ni del paco gate y tantos hechos que impactaron a la ciudadanía y quedaron en el olvido.
Las platas de la política en el caso Soquimich y Penta, finalizaron con clases de ética y el silencio de la clase política. Ya pasó de moda, la grabación de un parlamentario en reunión de muchas autoridades con el Presidente y – lo que es peor- su posterior entrega a la prensa. Hay muchas situaciones políticas que pasan al olvido de manera sorprendente
¿Por qué? Nadie sabe y parece que tampoco interesa descubrirlo.
Somos así y punto. Padecemos de una terrible amnesia, aunque algunos la sufren, solo cuando les conviene. Es así, lamentablemente.