Más de alguien señala que el dinero no hace la felicidad, pero la financia. Como éste, existen muchos dichos que sentencian la importancia del dinero en el mundo actual.
No hay duda que el dinero se ha convertido en algo fundamental para lograr el desarrollo personal y familiar. Hoy como nunca, se han postergado los ideales, los principios y los sueños, porque pareciera que lo único que importa es ganar mucha plata, para así poder comprar todo lo que se ponga por delante, incluso seres humanos.
Nos ha invadido la corrupción a gran escala y donde participan personajes que nunca hubiéramos imaginado. El oscuro negocio de la droga, la delincuencia a todo nivel, sin reparos ni detentes y todo lo prohibido, con tal de que aquello nos reporte ganancias económicas. Por obtenerlas, se pelean matrimonios, familiares, amigos y socios de empresas y emprendimientos. También se atacan de hecho a seres humanos y a algunos se les provoca la muerte.
Da la impresión que todo es válido con tal de conseguir riquezas materiales. La mayoría de las personas han olvidado que “la ambición rompe el saco “, seguramente porque ya lo tienen roto, y no poseen ningún interés en repararlo.
Creo que hay todavía cosas que son más trascendentes que el dinero, como la salud, el ser correspondido en el amor y tener vivos a los seres que uno ama, entre muchas más. Los invito a descubrirlas.