Que nos pasó que hemos cambiado tanto. Me incluyo.
Hoy nos juramos los dueños de la verdad absoluta y no aceptamos a quien piensa distinto. Aparentamos lo que no somos y hasta nosotros mismos nos creemos más de lo necesario. Lo único que nos importa es el dinero y para obtenerlo, más de alguno recurre a acciones reñidas con la ley.
Si ejercemos alguna jefatura, amenazamos, por cualquier cosa, con el despido a todos los que dependen de nosotros y si de nosotros depende una persona del sexo opuesto, tratamos de conquistarla y más de alguien no tiene mayores problemas para acosarla sexualmente.
Muchas personas no tienen amigos, porque la traición los hace dudar ante cualquier relación. El individualismo nos invade y nos domina. El materialismo derrotó totalmente al idealismo y los sueños fueron superados por la pesadilla del día a día. Hoy somos desconfiados, egoístas, ambiciosos, avaros y dobles. Miramos solo lo que nos conviene y no nos importa, si para lograrlo dañamos a otros.
El “yoismo“ derrotó totalmente al “nosotros“ y la egolatría narcisista se impuso a la modestia y la humildad.
¿Qué podemos hacer ante esta cruda realidad? Solo recordar que cuando estábamos en la Universidad, creíamos que íbamos a cambiar el mundo, sin que nos diéramos cuenta como el mundo nos cambió a nosotros.
Una lástima.