Se fueron mientras crecía el lenguaje comunicacional de Internet. Lentamente desaparecieron y no hicieron ruido. Se quedaron en el recuerdo de una época que se fue y miró con sorpresa que el modernismo las borraba, sin ni siquiera dejar huellas.
ESTADIO fue un publicación señera en materia deportiva, al igual que DEPORTE TOTAL, como ECRAN en la parte artística y VEA en lo policial.
En ERCILLA se imponía la política al igual que en HOY.
PAULA en la moda y en el feminismo naciente. BARRABASES fue un comics que impactó a los lectores, mientras EL PINGUINO, entre el chiste picante y las curvas de las vedettes de moda, cautivaba a los varones.
Había revistas esencialmente femeninas, como ROSITA y CONFIDENCIAS y revistas para mirar cómo FLASH, publicación que basaba su contenido en la fotografía.
Las revistas de fotonovelas causaron impacto en la década de los 60 – 70 y CINE AMOR fue la pionera y la más vendida. Para la juventud de esos tiempos, RITMO marcó, imponiendo a los ídolos de la nueva ola y a los lolos y lolas de Música Libre, programa de televisión de mucho éxito en aquellos años.
Después, vinieron revistas que marcaron otro estilo como COSAS y CARAS.
También, algunas que se dedicaron a la televisión y aparecieron TV GRAMA y TV NOVELAS.
Surgieron muchas otras, como QUE PASA, FOTO SPORT, MI VIDA y otras que se fueron para siempre, dejando los kioscos vacíos de publicaciones y llenos de chocolates, golosinas, chicles y dulces.
Sin duda, se demostró nuevamente que todo es desechable en los tiempos que vivimos, incluso las revistas que ya no existen y que lentamente se irán borrando de nuestra memoria, aunque no nos guste. Es lo que hay hoy en día.
