Un “18” en familia y recordando la historia.
Almuerzo familiar dieciochero bajo parrón sin uvas pero adornado con banderitas chilenas y empanadas: Ahora están mejores porque no se repiten al amortiguar más el pino; botellas de blanquillo, tintolio, pipeño, cerveza, que sueltan la lengua:
-Por lo menos estas noches televisivas sirvieron para dejar de ver tanto homicidio, estafa, corrupciones. Hemos descansado un rato de los Hermosilla, la Vivanco, Villalobos, los Sauer y Topelberg, acota un comensal.
– ¡Una gran cosa! ¡Un descanso para el alma!… Fíjate que yo no tenía ni idea de que Putaendo, en la región de Colchagua, era tan importante, como me enteré en el programa Los pueblos que marcaron el inicio y el fin de la Independencia, da cuenta el de más edad. Y, diciendo ¡Salud! muy sonriente confiesa: el nombrecito de esta localidad lo tenía pegado a los campeonatos de striptis que hacían en el Teatro Picaresque, allá por los sesenta y que siempre los ganaba Miss Putaendo.
–Abuelo, ¡lindo su aporte cultural! retruca un nieto. Entonces, ahora gracias a TVN, se habrá informado que ese fue el primer pueblo que a comienzos de 1818 pisó el Ejército de José de San Martín después de cruzar la cordillera por el Paso de Los Patos. Para recordar el suceso, ¡sí hasta existe un monumento en el centro de la plaza, al lado del árbol en que el Libertador amarró su caballo!
-En el mismo espacio, imagino que también se habrá enterado de lo difícil que fue sacar a los españoles desde Chiloé. Para mí fue una novedad lo que pasó, aporta un segundo nieto y suma: Siempre creí que fue la batalla de Maipú la que expulsó definitivamente a los invasores y anoche en la tele me cuentan que ellos se quedaron siete años más reinando en el sur.
-De esas terribles campañas, sí que tenía noticias, reacciona el veterano. Y les agrego que fue Ramón Freire quien, enseguida de firmar el Tratado de Tapihue con los mapuches que simpatizaban con los visigodos y estaban contra los patriotas, ordenó llevar a cabo dos campañas. La primera, en 1824, fue un rotundo desastre con cientos de chilenos muertos. Al año siguiente, con la cooperación de militares europeos que habían peleado en las guerras napoleónicas, logró derrotar a las fuerzas de Antonio Quintanilla que, desde Lima, contando con el apoyo de Simón Bolívar pretendía anexar Chile al virreinato del Perú. Por si acaso, Tapihue significa lugar de ahí ¡Pongan más sangría a este vaso!
El sobrino que le sirve, inquiere:
¿Y qué me dice del documental El Niño Rojo?
Una sobrina que saborea una cerveza en su lata interviene ahora:
-A pesar de que yo lo había visto cuando lo estrenaron hacer una década, me gustó el trabajo del director Ricardo Larraín. Tiene una buena ambientación colonial, exhibe las desigualdades sociales, los abusos de los peninsulares, el sometimiento de las mujeres. Considero que mientras más se muestre nuestra historia, mejor nos vamos a conocer y entender que somos una nación mestiza. Es una contribución valiosa al conocimiento de una parte oculta de la vida de Bernardo O’Higgins: ¡Yo desconocía la importancia que tuvieron los mapuches durante su infancia!
De repente entre brindis y degustación de empanadas, la cueca inauguradora del Presidente Boric en la fonda oficial 2024, acapara la atención mezclando voces:
–Su actuación serán puntos a favor en las encuestas. Demostró simpatía, naturalidad. Nunca dejó de sonreír.
-¡Con la Irací parece que no habían ensayado! ¡La alcaldesa se le arrancaba en las vueltas!
-Comparado con años anteriores, mejoró mucho. ¿Y usted abuelo, qué opina de su nueva pareja? ¿Verdad que se ven bien y contentos? ¿Sabe que ella es ingeniera química, porteña, basquetbolista seleccionada chilena y que el Presi le instaló en cerro Castillo un cesto para que entrene? ¿Será la misma joven que él iba a ver a un edificio en La Reina, cubriéndose la cabeza con una mascarilla y un jockey?
-Por favor a mí, no me metan en líos de faldas. Estoy muy viejo para esos trotes. Sólo la historia patria se encargará de consignar si este Boric, admirador del básquetbol femenino, era el mismo galán invernal incógnito de La Reina… Mejor, hagamos ¡Salud!