¿Qué nos hizo cambiar tanto?… por Alfredo Lamadrid B.

Me encuentro con un amigo que no veía hace unos años. En la conversación, él me repite dos o tres veces la frase del momento.

“Es que Chile cambió”

Al separarnos, camino pensando en qué cambió nuestro país y veo qué hay menos seguridad y por lo mismo más delincuencia. La gente vive con temor y existen barrios donde reina el hampa, la violencia y el narcotráfico. La policía se ve superada por los asaltos, robos y portonazos. En la Araucanía, los problemas, que vienen de décadas, no se solucionan y la violencia es cada vez más contundente. La migración hacia nuestro territorio es incontrolable y en ella se esconden maleantes y personas que viven de la drogadicción. No todos sin duda, pero existen esos personajes. Lugares importantes se ven invadidos por carpas y viviendas improvisadas. Las tomas son innumerables, por la falta de viviendas. Los vendedores ambulantes inundan las calles, donde desplazan al comercio establecido. La corrupción no se detiene y mancha a las instituciones uniformadas. Los colegios no funcionan regularmente, por las demandas estudiantiles. Los habitantes se endeudan y muchos no pagan los arriendos y los servicios básicos, mientras las contribuciones alzan sus precios. Los políticos se enredan en discusiones que a la ciudadanía no le interesan, desnudando sus pequeños fanatismos.

¿Para qué seguir quejándonos? Es mejor que vuelva la solidaridad, el respeto a la autoridad, el orden y que unidos logremos el Chile que queremos. Más justo. Más unido y menos agresivo. ¿Será posible? Todo es posible, cuando el ser humano antepone su nobleza y su humanidad al individualismo y los pedestres intereses. No lo olvide: Todo es posible, aunque no lo parezca.

Alfredo Lamadrid B.