El éxito obtenido por el espectáculo con que el Teatro Caupolicán celebró los 60 años de la Nueva Ola chilena, el domingo pasado, ha llevado a los ejecutivos del local a plantearse la meta de producir nuevos espectáculos con figuras nacionales, persuadidos de que obtendrán una respuesta que los sostenga en el tiempo.
El lleno total que se produjo en el aniversario del movimiento musical de los ’60, se iguala al que obtienen afamadas figuras internacionales en el mismo escenario.
En casos como la Nueva Ola, se trata de producciones propias, en que el Teatro se encarga de todas las fases de la realización, a diferencia de la mayoría de las presentaciones que allí se realizan, en las cuales se limita al arriendo de las instalaciones.
El gerente general del establecimiento, José Antonio Aravena, expresó que la experiencia los anima a programar nuevas funciones con valores locales, cuyo contenido y protagonistas se encuentran estudiando y esperan incorporar en la cartelera del próximo año.
DEDICADO A ZALO REYES
Aravena se mostró gratamente complacido por la respuesta del público a la convocatoria de la Nueva Ola: “Había quienes nos decían que era arriesgado realizar este espectáculo, por la situación que vive el país y porque la gente mayor a la que principalmente iba dedicado la presentación, tal vez se abstendría de asistir por las condiciones climáticas de agosto que no son las más favorables para ellos”.
El ejecutivo se manifestó feliz de que estas aprehensiones hayan sido desacreditadas por la masiva presencia del domingo pasado.
Aravena también destacó la calidad del espectáculo que se ofreció y la capacidad de reacción que tuvieron cuando se conoció el fallecimiento de Zalo Reyes, minutos antes del comienzo del espectáculo”.
“Con el equipo del Teatro tomamos rápidamente la decisión de dedicar la función a Zalo, por el que teníamos gran cariño y admiración y al que tuvimos muchas veces en nuestro escenario. Pusimos las imágenes de Zalo en pantalla y a mí me correspondió comunicar al público la noticia de su partida, tras lo cual emitimos por altoparlantes su gran éxito “Con una lágrima en la garganta”.
Aravena cuenta que en la sala se produjeron escenas de emoción y que lo ocurrido dio un carácter especialmente sensible a la jornada.
Sentimientos semejantes se produjeron en el homenaje que se rindió a Luis Dimas, a quien se entregó póstumamente el Caupolicán de Oro, máximo galardón que entrega el Teatro, que fue recibido en el acto por su hijo Salvador.
A esto se sumó el saludo en video que enviaron desde Canadá otros dos hijos del cantante, Andrew y Anita, quienes destacaron valores de la figura de su padre. Contaron que él temía fallecer en Chile solo y abandonado y agradecieron a su primo, sobrino de Luis Dimas, Enzo Corsi, y su esposa, Lorena, quienes cuidaron al artista hasta el final.
Culminó el bloque el cantante Jorge Caraccioli interpretando los mayores éxitos del repertorio de Dimas, lo que fue premiado por una ovación de parte de los asistentes.
HONORES AL AUTOR DEL ROCK DEL MUNDIAL
Otro momento de emoción fue cuando se rindió tributo a los 100 años de la radiodifusión en Chile, a través de la entrega de una distinción al locutor y animador Miguel Davagnino, por su apoyo a la Nueva Ola desde que esta corriente artística comenzaba a gestarse en Chile.
Igualmente memorable fue la dedicación del Caupolicán de Oro al Maestro Valentín Trujillo, a pesar que este no se hizo presente para recibirlo, por encontrarse de viaje fuera del país junto a sus hijos.
El mismo galardón se otorgó de manera póstuma a Jorge Rojas Astorga, creador del Rock del Mundial, éxito discográfico que es considerado la consagración de la Nueva Ola, en 1962, fecha que se reconoce como de inicio de este movimiento, desde la cual se cumplen 60 años.
El trofeo fue recibido por su hijo, Jorge Rojas Cossio, que siguió adelante como director y manager del grupo Los Ramblers, después de que su padre y el vocalista del conjunto, Valentín Fernández, fallecieron en un accidente automovilístico, en 2018.
Los Ramblers cerraron la jornada de los 60 años de la Nueva Ola chilena, el domingo pasado, con una lección de resiliencia, al haber podido remontar después del duro golpe producido por la trágica desaparición de dos de sus piezas vitales.
El joven cantante Sebastián Apiolaza, que fue elegido para reemplazar a Fernández, en el programa de TV “Cada Día Mejor”, demostró las condiciones que le han permitido estar al frente de esta nueva etapa de la agrupación.
Una lúcida presentación hizo también Cecilia, aunque limitada en los movimientos por su estado de salud. No obstante, el público la recibió y la premió con entusiastas aplausos.
Algo similar ocurrió con el argentino Donald, que vino s sumarse al aniversario de la Nueva Ola chilena, como representante de la homónima de su país.
Muestras de aceptación también recibieron las demás figuras del elenco del domingo pasado, Carlos Alegría, Luz Eliana, Marisa, Carmen Maureira, Larry Wilson y Fernando Montes.
“¡GRACIAS! POR TANTO TALENTO Y AMOR”
Una gran satisfacción reinaba entre los artistas tras el espectáculo, lo que se reflejó en las expresiones que vertieron en un chat de whatsapp que compartieron con motivo del evento..
Donald: “Mejor no podríamos haberla pasado esta vez en Chile. Nos agasajaron como si fuésemos duques. Nos llevaban, nos traían, nos mimaban, nos llenaron de cariños y atenciones. José Antonio Aravena, Paula, su señora, y todo el equipo del Teatro Caupolicán, nos hicieron sentir como si estuviésemos en nuestra propia casa. El Teatro se llenó y el administrador (acostumbrado a tener la sala casi siempre llena), no salía de su asombro, pues aunque fue una apuesta empresarial muy fuerte, el hombre no estaba seguro si la gente mayor iba a acudir, porque los “viejitos” son poco dados de salir. Sin embargo, salieron, y entre personas mayores y jóvenes, a las tres de la tarde ya sumaban más de cuatro mil quinientas almas.
“El lugar inmenso se hizo chiquitito, y resultó tan íntimo y cálido como cantar en un pequeño pub. Gracias familia Aravena por quererme y confiar en mí una vez más. Gracias queridos hermanos de Chile”.
Larry Wilson: “Gracias a Donald y a su linda hija (que lo acompañó en coreografías y voz), llena de luz, por traernos esos hermosos temas que acompañaron nuestros veranos jóvenes. Gracias por poner el rewind a nuestras vidas”.
Luz Eliana: “¡¡¡Gracias, gracias, gracias!!! Por taaanto talento y amor!!! Fue fantástico compartir con todos… y especialmente aplausos para Luis Gutiérrez (director artístico y orquestal del espectáculo). Bendiciones, abrazos, besitos!!!”.
LA ALTURA DE LUIS DIMAS
Carmen Maureira: “Felicidades para todos. Fue un arriba el telón y todo salió maravilloso. Larry con su maravillosa voz. Igual Marisa, Carlos Alegría, Luz Eliana, Los Ramblers. Todo salió perfecto con el sonido de Luchito (Gutiérrez). Un abrazo para cada uno. Los quiero!!!!!!
Marisa: “Amigos músicos de tantas jornadas. Un abrazo enorme. Gracias! Nos fue excelente a todos. Gracias por su apoyo. A todos, un abrazo asííííí!!!!
Myriam Córdova, esposa de Fernando Montes: “Mis agradecimientos a la empresa, a ustedes, sus compañeros, a los músicos, al público, a la buena energía que hubo, a la buena atención, en fin, por todo y a todos, gracias, gracias, gracias”.
Carlos Alegría: “A todos mis amigos de la Nueva Ola, les mando un gran abrazo de felicitaciones, por su gran y brillante actuación, que fue premiada con el cariño y el aplauso del maravilloso público que nos acompañó”.
Jorge Caraccioli: “Muchas gracias, Fue un honor para mí compartir escenario con todos ustedes. Espero haber dado el alto para tamaño artista como Luis Dimas. Gracias. Bendiciones para todos”.
