Las personas mayores son el grupo de audiencia más grande en TV abierta con un crecimiento de un 44,5% en los últimos tres años. Por otra parte, tanto los niños, niñas y adolescentes han bajado su tiempo frente al televisor en un 51,3% y 57%, según estadísticas del Consejo Nacional de Televisión.
Cada vez se ven menos jóvenes instalados frente a un aparato de televisión, ya sea para informarse o entretenerse. Los hábitos han cambiado en forma radical especialmente con las llegada de las redes sociales y sus diferentes formas al alcance de un teléfono celular o cuando mucho de un computador portátil.
Ahora si un joven quiere informarse entra a Twitter y busca los trending topics (con el consiguiente riesgo de toparse con las cada vez más frecuentes noticias falsas o fake news). . Si es noticia relevante, ya estará ahí. También se puede gastar unos segundos más en buscar el término clave que le permite saber de lo que se está hablando. Si busca entretenerse recurre a Tik Tok o Instagram. Además, en el celular también puede descargar productos de las plataformas de pago como Neflix, HBO o Amazon Prime.
Según datos recogidos por la empresa Kantar Media de España, El público joven se ha acostumbrado a la inmediatez. Ven lo que desean cuando y donde quieren. La televisión, en cambio, no les ofrece esa facilidad. Acostumbrados cada vez más a usar dispositivos móviles sentarse frente a un aparato que se maneja a través de un mando a distancia no les llama la atención.
En TikTok o Instagram encuentran contenido en menos de un segundo deslizando el dedo hacia arriba o hacia abajo de la pantalla. Encuentran vídeos cortos, que se puedan consumir rápido, que en breves segundos provocan una reacción y que puedan pasar rápido para buscar una nueva reacción unos segundos más tarde.
Así, las formas de entretenimiento han cambiado y las generaciones más jóvenes están lejos de la televisión tradicional, la cual se está reduciendo a las personas mayores.