Parece que fue ayer, cuando el músico argentino Astor Piazzola, luchaba por imponer un nuevo ritmo y un estilo diferente, en la música trasandina.
Un revolucionario, para algunos y para otros, un sacrílego. Para los más, uno de los artistas más importantes de las últimas décadas.
Este bandoneonista y compositor, deja un legado que comanda “Adiós Nonino”.
Había muchas cosas que Piazzola criticaba del tango compadrito, como él lo llamaba con cierta indiferencia.
A los 71 años partió. Había enfrentado una trombosis, que nunca pudo superar totalmente.
Se fue volando en una ilusión “súper sport”y esquivando las “nubes de algodón”
Este mes, han pasado 30 años desde que se fue… y lo seguimos echando de menos.
