Juan Guillermo Vivado, durante la década de los 80 y 90 fue uno de los animadores de televisión más queridos y reconocidos en Chile como conductor de noticias y animador de programas de conversación. Llegó a la TV en 1979 con el programa “525 líneas” en Teleonce (hoy Chilevisión), donde realizaba entrevistas a distintas personalidades. En el mismo canal fue conductor de noticias y siguió con esa faceta en TVN, estación en la que además fue el presentador de “Informe Especial”. Una de las últimas apariciones oficiales como animador fue en Canal 13 en “Noche de Ronda”, tomando el lugar de Raúl Alcaíno.
La siguiente crónica es parte de la entrevista que Vivado mantuvo con Alfredo Lamadrid para el canal en Youtube de Cada día MejorTV.cl, al cual puede acceder para revisar el contenido completo.
¿Qué hiciste al salir de la televisión?
Salí del Canal 13 cuando llegó como director Rodrigo Jordán. Sin mayores explicaciones puso término a mi contrato, pese a que el mismo me había ofrecido una renovación.
Luego hice un programa para empresa y mi ligazón actual es por apariciones esporádicas, aunque en el espacio de Pasapalabra soy casi una figura estable.
¿Sientes nostalgia…?
Lo pasé muy bien en la televisión en la que estuve más de veinte años. Tuve la suerte de estar vigente cuando se hacían grandes programas, con inmensas producciones, con gran control de calidad, de tal manera que tengo un gran recuerdo. Además, en una época en la que traían artistas de primera calidad.
¿Cuál es el programa que más recuerdas?
El programa que más me marcó fue “525 Líneas”, cuando lo realizamos contigo en Teleonce. Era una revista televisada el día domingo por la mañana, y los agogeros nos decían que nadie lo iba a ver porque nadie ve televisión los domingos por la mañana.
Y por eso le fuiste a preguntar a Raúl Matas…
Claro que sí; lo hice porque era una apuesta inmensa. Era una revista televisiva que me encantó. Daba la posibilidad de entregar una visión general de diversos temas de interés.
Claro que el que tuvo mayor trascendencia fue Informe Especial de TVN por el impacto que provocaba. Era un programa con un rating espectacular. Yo no hacía los reportajes, era el presentador, pero la gente me recuerda mucho por ese programa.
¿A qué te dedicas en la actualidad?
En la actualidad me dedicó a cosas vinculadas con mi otra profesión, te recuerdo Alfredo que soy abogado. Con un grupo de amigos estamos explotando un par de pequeñas minas de cobre en la zona de Taltal. Es un emprendimiento donde pongo mis conocimientos del derecho.
¿Qué opinas de la televisión actual?
Creo que la televisión actual empezó a perder la brújula de los contenidos cuando incorporó a la programación de entretención la farándula Creo que hacer carne de situaciones personales y privadas y que se transformen en un género televisivo hizo perder el contenido real de la entretención. Felizmente ha ido variando y tiende a mejorar.
¿Consumes farándula?
Trato de no verla porque no me satisface. Hablar de la persona que anda con tal o cual, por ejemplo, no me gusta.
A ti te levantaron bastantes calumnias…
Para serte sincero, yo casi no las conocí. Pienso que cuando hay personas que por alguna razón, básicamente envidia, echan a correr un rumor sin ningún fundamento, lo importante es que eso no te altere. La única preocupación es si ese rumor llega a tus parientes, tus hijos, tu señora. A mí nada de eso me afectó. Nunca he hecho caso. Pero cuando ese rumor sin fundamentos se ancla en un programa de televisión y se difunde, no se debe aceptar.
Te quiero decir que soy un defensor absoluto de la libertad de expresión, tanto así que me tocó defenderla en la Convención Constitucional porque fui invitado a exponer sobre el tema. Considero que la libertad de expresión es de los derechos más importantes para el ser humano y la sociedad. Si yo pienso de una manera la puedo exponer y si tú piensas de otra también tienes el derecho a darla a conocer, con la salvedad, en ambos casos, que en el ejercicio de esa libertad no denigres ni injuries a la otra persona ni afectes su honra. Lamentablemente, eso no se respeta mucho actualmente en las redes sociales.
¿Cuántos hijos tienes?
Tengo cuatro, tres mujeres –Carolina, Francisca y Fernanda- y un hijo –Juan Guillermo- que se llama así porque fue mi señora la que escogió el nombre. Yo no quería porque no soy partidario que los hijos tengan necesariamente el nombre del padre.
¿Y cuántos nietos?
Siete.
Yo me casé a los 20 años y ya cumplí 50 años de casado, es decir llegué a lo que llaman las Bodas de Oro. Fíjate que fui abuelo a los 45; mi hija menor tenía seis años de diferencia con mi nieto mayor y por eso ellos son como hijos más que nietos.
Te voy a contar una anécdota al respecto: un día fuimos a un centro comercial con mi Tita, mi señora, y el nieto mayor que era un niño entonces, y yo todavía me sentía juvenil. Ella me pidió que paseara con el chico mientras entraba a una tienda de cerámicas por temor al eventual desastre que el nieto podía provocar. Entonces entré a una tienda de revistas y la que atendía era una chica estupenda. La mire, saco pecho, hundo la guata y con mi mejor voz de locutor le pregunto: “¿Tiene la revista Capital?”. Ella me muestra un estante y me dice “claro, ahí está”. En ese momento el chico me tira del pantalón y me dice “oye Tata”, cuando yo tenía desplegado todo mi encanto. Lo único que se me ocurrió decir fue “oye anda un niño perdido”.
Ja,ja,ja…muy buena anécdota Juan Guillermo para terminar esta interesante entrevista. Ha sido un placer conversar contigo.
Lo mismo digo Alfredo, y espero que nos veamos pronto.
