¿Qué es lo que la ciudadanía desea? Qué se le solucionen sus problemas del día a día. Que su dinero le alcance para cubrir sus necesidades básicas. No vivir atemorizada con qué va a perder “la pega”.
No estar atormentada con los impuestos y espera que el IVA baje o sea diferenciado, para que no se castigue tan duramente a los más necesitados. Seguridad para desenvolverse sin miedo en su diario quehacer, que las pensiones para la vejez sean justas. Que la salud sea buena y oportuna para todos. Que la educación tenga un nivel de calidad indispensable para el futuro de nuestros hijos. Que se termine con la corrupción y el narcotráfico… y algunas cosas más que son no tan terribles ni imposibles.
No es fácil, sin duda, pero eso desea y necesita la población y eso lo va a buscar, hasta encontrarlo. Por eso apoyó a Boric en una elección y en una posterior a los que representan a Katz. No le interesan las ideologías ni los fanatismos que esconden las verdades.
Tampoco lo que los tramita la clase política. Menos, los que figuran todos los días en la televisión y hacen gala de una verborrea que todos rechazan. Hechos y no palabras, parece ser la respuesta que se necesita hoy.
¿Es tan difícil lograrlo? Ojalá, alguna vez, se escuche a los que no tienen voz.